1984 - 1987 - Produción, Custom Kits

1984 - Jörg Driesner

Jörg Driesner

En esta época fue cuando Jörg Driesner empezó a trabajar con nosotros, relación que sigue hasta la actualidad. Jörg procede de Brunswick y es, por ello o a pesar de ello, un hombre de humor seco. Y a la vez, un hombre entrañable. Desafortunadamente, a finales de los 80 se cortó dos dedos con una sierra circular en una carpintería de Brunswick. Eso supuso el comienzo de su carrera como guitarrista de lap steel.

Bernd Röttger y Martin Wilkens

 Bernd Röttger

La carga de trabajo fue aumentando y contratamos a Bernd Röttger como reparador y montador. Para nuestra sala de exposición creó un stand decorativo, cubierto de espejos en la parte inferior. Gracias de nuevo, Bernd, ¡quedó genial! Y Martin empezaba en nuestro departimiento de producir mastiles.

 Showroom

El Abuelo Osburg

Fue un tal Friedel Osburg quien construyó nuestra grandiosa sierra para las ranuras de los trastes. Era un viejo combatiente del frente ruso que "tuvo la suerte" de que le alcanzara metralla de una granada en una pierna. Gracias a eso pudo volver a casa, cojeando, pero habiendo escapado del infierno de Stalingrado. Osburg -que murió a mediados de los 90- era mecánico y tenía un taller en el barrio obrero de Hannover-Linden. No se trataba de un taller de cerrajería normal, sino de algo mucho más sofisticado: dos tornos, fresadoras, punzonadoras y muchas otras cosas. Sin embargo, tratar con él implicaba un pequeño problema: al principio de cada visita había que soportar al menos media hora de historias del frente ruso. Pero al menos te las contaba con ese maravilloso dialecto de Linden: "Los rusos también tenían mujeres en el ejército y eran más duras que los hombres. Siempre con la bayoneta puesta, como animales". Con batallitas rusas o sin ellas, Friedel Osburg no era un nazi y era un hombre con recursos. Hacía de todo para nuestras máquinas: toneladas de clavijas y anillos de arranque para nuestras copiadoras, herramientas de prensado para el pegado de los cuerpos de guitarra y mucho más. Era sencillamente estupendo. También nos fabricó una herramienta de perforación y doblado para el ajuste del engranaje del trussrod de nuestras primeras guitarras Duesenberg Metal de los años 80. Siempre que tenía una buena idea para nosotros, solía decir: "¡Dejadme que le dé una vuelta a eso!“.


Aquí nuestra sierra para las ranuras de los trastes, ¡un monstruo realmente ingenioso! Un grueso eje con 24 hojas de sierra. Montada frente a este eje, una pieza enorme, que giraba gracias a un engranaje de cadena, y a la que se podían fijar cuatro mástiles diferentes. El mástil se aproximaba a las hojas de sierra con sólo pulsar un botón, todas las ranuras de los trastes se serraban a la vez y listo. Sin embargo, siempre nos preocupó la seguridad. La mordedura de más de 20 hojas de sierra a la vez en la madera del diapasón, durante este proceso de serrado, implicaba una fuerza brutal. El uso del casco estaba a la orden del día. En una ocasión esta máquina reventó el mástil de un bajo mientras lo serraba y algunos fragmentos de la hoja de la sierra volaron por la habitación. Miedo y terror, incluyendo el coste económico de la reparación.


El abuelo Osburg fue quien creó en el torno los pomos en forma de tetilla de nuestra guitarra Heilmann, lo que no fue un trabajo fácil. Y todavía estaba interesado en las mujeres y el sexo. Una vez comentó de pasada que todavía se acostaba con su mujer a veces, por las mañanas... También solía disparar a las palomas con su rifle de aire comprimido en el patio, a mediodía. Y poseía una pequeña destilería de aguardiente, una gran estructura de cristal hecha con varios tubos y tinas, en la que destilaba sobre todo aguardiente de patata. Ilegalmente, por supuesto.

 

Pintando con Sascha

Lackieren mit Sascha

En esa época, la mayoría de los constructores de guitarras y pequeños fabricantes encargaban la tarea de pintura a la compañía Clover en Recklinghausen. Eran muy buenos, pero el interminable ir y venir de guitarras por correo o UPS era muy molesto. Encontramos un pintor cerca de Hannover que también era muy bueno. Pero seguíamos teniendo que encargarnos de conducir y de gestionar nosotros las entregas y recogidas. Para acabar con todo eso decidimos encargarnos de la pintura nosotros mismos. Había que contratar a un pintor propio. Y encontramos a Sascha.

Sascha, nacido en Rusia, en realidad habría querido astronauta, como cualquier ruso que se precie. Sin embargo, realizó unas prácticas de fabricación en la meca de la luthiería alemana: Mittenwald. En la empresa en la que estuvo (siendo explotado, como la mayoría de los aprendices) se había dedicado principalmente al barnizado y lo había aprendido todo sobre el tema. Bernd Röttger, siempre un hombre de acción, había construido y soldado una cabina de pintura, poco antes de la llegada de Sascha. Estábamos preparados.

 

Lackierkabine

Atari

El ordenador de nuestra empresa tenía entonces enormes posibilidades: muchas fuentes y tipografía, programa de gestión de existencias, etc.

String Bender




En ese momento éramos los únicos en Europa que ofrecían una Tele con String Bender (Parsons & White). En este sistema, el enganche de correa cercano al mástil mueve un mecanismo en el cuerpo que baja la cuerda B. Aquí vemos a Heinz Rebellius con nuestra creación.

Thomas Stratmann

Stratmann und Co

Entonces llegó Thomas, un carpintero ingenioso y hábil, que se dedicaba a las reparaciones y a montar instrumentos a medida. Con él fundé más tarde "Guitarras de Formentera", la primera escuela de construcción de guitarras del mundo, en aquella isla tan loca.

En 1983 estuve en este maravilloso lugar por primera vez. Un verdadero pequeño paraíso con aguas caribeñas, bares de playa totalmente relajantes, música en vivo, jóvenes individualistas, fiestas y rock'n'roll.

Pero el sueño de una escuela de construcción de guitarras en una hermosa isla no iba a durar para siempre. Desafortunadamente, nuestro proyecto de Guitarras de Formentera acabó yendo cuesta abajo al cabo de varios años. Podría publicar más sobre ello aquí, aunque no sin ofender a algunas personas. Puedes leer más sobre ello en mi libro "Angst & Schrecken auf Formentera", escrito en 1998. Está disponible en librerías o incluso en esa empresa de venta online donde puedes conseguir todo lo que necesites ( y donde es mejor no comprar).

Custom Custom

Un repaso a nuestras creaciones de esta época. Colores, formas y combinaciones de nuestro catálogo. Rockinger Axes

Rockinger Axes
 Rockinger Axes
 Rockinger Axes
Rockinger Bässe
Rockinger Benders

Una bonita mini Explorer. La tapa en perloid verde.


Fargo-Pedder

Como parte de nuestros trabajos de personalización, también hicimos dos bajos bastante exóticos para Peter. El primero con un cuerpo de estilizado de Explorer, el segundo fue el "Eagle Bass" que se convirtió en una verdadera leyenda. Ambos bajos tenían un trabajo laborioso de tallado de plumas y otros detalles. Peter acababa de reformar su primera banda: "Fargo". Luego se haría más famoso con su formación “Victory”.

 Fargo Bass
 
Fargo Bass
Fargo Pedders Vogelbass

Producción 

Después reconstruir el taller grande fue cuando nos pusimos en marcha realmente. Nuestra maquinaria se hizo más sofisticada, especialmente gracias a la amorosa ayuda del abuelo Osburg. Teníamos, por ejemplo, un ingenioso cortador del alambre de trastes. Era muy sencillo, con dos discos de acero de unos 15 mm de espesor en un eje y agujeros exteriores con diferentes diámetros para diferentes dimensiones de alambre. Comprábamos el alambre a granel en rollos. Lo colocabas a través de los dos agujeros, empujabas un disco contra el otro con una palanca y cuando el alambre se rompía ¡ya estaba! ¡A la medida correcta!

 

Winkelmann

Empezó a trabajar para nosotros también Klaus Winkelmann, carpintero. Se encargaba de la preparación de la madera, es decir, cortar en bruto, pegar, regruesar, cepillar, tratar la madera y fresar la forma. E instalamos un gigantesco sistema de extracción de virutas y polvo, con gruesos tubos plateados que recorrían las habitaciones.

Body Workshop
Altendorf
Hälse fräsen
Holz
Holz Winckelmann
Winckelmann Body Routing
Benze Fräsen
Rockinger T-Shirt

El Lamello

Para los que no lo sepan: los lamellos se utilizan, por ejemplo, para unir exactamente dos mitades de carcasa de madera. Se cortan ranuras en ambas partes con una fresa especial para lamello. Después de recubrir ambas superficies de madera con cola, se introducen a presión al menos dos placas de Lamello en las ranuras y se unen las dos partes con abrazaderas para que encajen exactamente.

Nuestro Horst Gropp ha creado esta divertida y biológicamente imaginativa obra de arte con este fin, ¡compruébalo tú mismo!






“Permítanme que se lo presente. Se llama Knorn, Peter Knorn, más conocido como Fargo-Peter. Durante seis décadas ha estado moviéndose y agitándose, viviendo y muriendo en un sueño a diario, esperando que este sueño llegue a un final del que salga ileso.

Knorn podría ser cualquiera, básicamente. Un inocente y bien educado chico de 16 años que sin tener ninguna culpa acabó metido en el rutilante mundo del Rock and Roll y que decidió, en 1973, hacerse músico. Concretamente, músico de Rock and Roll. Hasta 1993 participó como bajista en una buena docena de producciones discográficas y las defendió en escena con sus bandas Fargo y Victory, dando cientos de conciertos por todo el mundo. Después, se bajo de los escenarios, encargándose de la organización para otras bandas. Durante 10 años fue manager de grandes del rock, con reconocimiento internacional y montó su propia discográfica.

Cuando se ha sido parte de un círculo selecto durante tanto tiempo, se descubren inconsistencias, consciente o inconscientemente. Incidentes que al principio no llaman la atención, pero que, sin embargo, pueden ser altamente explosivos. Ahora la verdad debe salir a la luz, en papel. El mundo podrá enterarse por fin de por qué algunos bajistas necesitan un doble de acción en el estudio, por qué los cantantes prefieren llorar sobre los hombros de los bajistas, y que los bajistas son básicamente pacíficos animales de rebaño- siempre que no se enfaden.

¿Y si lo hacen? Entonces cuidado, porque entonces los idiotas acaban a merced de las puyas inteligentes y a veces escandalosas de Knorn. Incluso con riesgo de que acabe en una misteriosa ola de suicidios. Una cosa está clara: las actividades del hannoveriano pueden haberse calmado en la misma medida que los nervios de sus vecinos, pero su afilada pluma podría abrir fácilmente viejas heridas.”

Matthias Mineur (periodista musical independiente)